Los amigos de Resonancias me piden muy amablemente que les cuente como llegué a conocerlos y yo, amablemente también y contento de hacerlo, les respondo:

No me los recomendó nadie, desconocía por completo su existencia, por lo que la sorpresa fue mayor y más agradable al encontrar Resonancias por casualidad, por inexistente casualidad, como todos sabemos.

Siempre he sido, desde adolescente, admirador de la obra de Castaneda (quién quiera que sea y donde quiera que esté). Así que disfruté —y mucho— leyendo “Carlos Castaneda, mago del intento” de Héctor Loaiza…

Luego vinieron más contenidos jugosos, opiniones inteligentes, buena literatura, mucho eclecticismo y dinamismo en el contenido… Todo unido a un excelente diseño del site. Así que, gracias amigos de Resonancias por este espacio. Muchas felicidades por estos diez años. Os deseo suerte y ánimo para continuar vuestra excelente labor de difusión y creación.