Domingo 05 | Mayo de 2024
Director: Héctor Loaiza
7.282.191 Visitas
Desde 2001, difunde la literatura y el arte — ISSN 1961-974X
resonancias.org logo
157
Opinión
4 4 2008
Arrabal responde al célebre Cuestionario de Proust, 2007
El principal rasgo de mi carácter: Mi tentativa (frustrada sistemáticamente, hasta hoy) de alcanzar la santidad civil. La cualidad que deseo en un hombre: La veracidad (el mayor talento). La cualidad que deseo en una mujer: La veracidad (el mayor encanto). Lo que más aprecio en mis amigos: La bondad. Mi principal defecto: Masturbarme. Mi ocupación favorita: Escribir, rezar, dibujar, leer, analizar partidas de ajedrez, fotografiar, meditar, resolver problemas, filmar, conversar con quienes quiero, etc. Mi sueño de felicidad: Nunca soñé con ella. Colecciono las bien llamadas en castellano ‘pesadillas’ [En inglés son terribles yeguas nocturnas.]. A Proust le hubiera dicho: “si existiera la felicidad ¿habría mejor calidad para alcanzarla que la generosidad?” Cuál sería mi mayor desgracia: Debo confesar egoístamente que morir después de mis seres amados. Quién me gustaría ser: Fernando Arrabal eunuco. El país donde desearía vivir: No veo otro lugar hoy y ahora que París: es decir donde habitan la mayoría de los seres a los que quiero. Mi color favorito: Depende. Ni de niño me resigné (como mis compañeros) a ser ‘para siempre’ hincha de un solo color, o de un equipo de fútbol, o de una formación política. La flor que más me gusta: Con Dalí me gustaba el nardo y en Ciudad Rodrigo el pensamiento; pero mis gustos siempre están sujetos a caprichos. La preferencia (imprevisible) por una flor dentro de un instante también será hija de la circunstancia. El pájaro que prefiero: Qué suerte tenía Proust: no parece que le atormentara ni la ambigüedad ni el principio de indeterminación. Mi autores favoritos en prosa: Hay tan pocos que sólo fueron prosistas. Me encanta la precisión de Baltasar Gracián o del ajedrecista Gata Kamski, o del filósofo Wittgenstein o la de mis amigos Kundera, Lis y Houellebecq, o la de un inolvidable y anónimo jugador de dominó de la calle ocho. Mis poetas preferidos: Hay poemas que trotan en mi cabeza. Algunos no sé de quienes son. Otros muy célebres los leo sin comprenderlos. Releo a menudo a Teresa de Avila, Juan de la Cruz, Arthur Rimbaud, Fernández Molina, Charles Baudelaire… mis entrañables. Mis héroes de ficción: Algunos santos. Algunos enamorados. Mis heroínas de ficción: Algunas santas. Algunas enamoradas. Mis compositores favoritos: Hoy son dos: Little Richard y Bach. Mis pintores preferidos: Actualmente sigo pensando, como casi siempre a lo largo de mi vida, que son El Greco y Julio Romero de Torres. Mis héroes en la vida real: Los que desertan la heroicidad para practican humildemente el don de sí. Mis heroínas históricas: las vírgenes por amor. Mis nombres favoritos: En este momento: Lis y Fando. Lo que más detesto: La mentira y quizás también sus retoños: la informalidad y la impuntualidad. Figuras históricas que más detesto: Los tiranos-titanes del siglo XX, que ambicionaron la bestialidad criminal de crear un hombre nuevo. El hecho militar que más admiro: Ninguno admiro aunque alguna gesta numantina llega a encandilarme. Quizás pueda admirar a la deserción de Cervantes en la batalla de Lepanto. El don de la naturaleza que desearía poseer: Volar. A menudo he pensado que llegaría a poseerlo. Cómo me gustaría morir: Dormido y antes de las personas a quienes quiero. Estado actual de mi ánimo: Como siempre: incapaz de dominar el caos o la confusión. Faltas que me inspiran más indulgencia: La falta de talento me inspira una forma de envidia. Mi lema: cambia por minutos. En este instante me siento tan creador que mi lema sería: “Juego a ser Dios y a veces lo consigo”.
acerca del autor

Fernando Arrabal nació en Melilla (Marruecos Español) en 1932, de padre republicano y madre franquista. Su padre era oficial del ejército español. Desde 1954 reside en París. Algunos títulos de sus dramas: "El cementerio de automóviles", "La comunión solemne", "El arquitecto y el Emperador de Asiria"... Sus películas: “Viva la muerte", en la que describe su infancia, atormentada por la desaparición de su padre durante la guerra civil española y la dictadura franquista. Además es poeta y pintor, como lo muestra el voluminoso libro de arte, "Arrabal espace", editado en francés en 1993 por Ante Glibota, y que presenta su obra literaria, dramatúrgica, cinematográfica y artística. Recibió en España el Premio Nacional de Teatro 2001, el Premio Nacional de Literatura Dramática 2003 y en 2006 le concedieron la Legión de Honor francesa.