Con gran ritmo y movimiento, su expresión puede considerarse como el contenido primordial de su actividad creativa. Ha entrado en una etapa evolutiva, producto de una disciplina de trabajo conjugada con su imaginación y estudios donde los cambios demuestran a un artista maduro en sus propuestas plásticas, temáticas y conceptuales, en las formas nos presenta un mundo imaginario, moderno y ancestral, donde el color cumple una función fundamental, creando una atmósfera misteriosa que nos atrapa la imaginación al percibir ese entorno mágico y exuberante. Al estar al frente de las obras de este artista, comprobarán que es capaz de captar con un gesto, con un color, con un simple acorde lo que el discurso y los conceptos no llegan a expresar realmente. (Sergio José Velásquez, pintor nicaragüense).

• José A. Vargas, renacer de una ciudad perdida, por Arnulfo Agüero