PARIS, Dic 7 (AFP) - "No es una exposición de pintores bajo influencia", sino de una "connivencia de espíritu" entre artistas, declara de entrada la galerista Françoise Thuillier, que organiza en París la muestra "Alrededor de Roberto Matta", con obras del gran surrealista chileno, de su compatriota Patricio Zamora y del peruano Leoncio Villanueva. Inaugurada el miércoles en la prestigiosa Galería Edifor de París la muestra reune obras de los tres artistas, expuestas como en un diálogo en el que priman el humor y la poesía. Y es que "el humor, a veces el humor negro, y la poesía se alían muy bien con el surrealismo", dice Thuillier, directora de la galería. Matta fue un punto de partida. La galería posee 16 litografías del artista, que Thuillier prefirió no subastar para evitar que "cayeran en manos de un coleccionista que ni siquiera habría abierto la caja de madera que contiene ese tesoro". "Para no ver esas litografías encerradas en un cofre, preferí quedármelas y mostrarlas, aunque para ello tuviera que proponerlas a la venta separadamente", explica a la AFP Thuillier, señalando que "cada una de ellas cuenta una historieta, un chiste. Tienen una alegría que nos viene muy bien en estos tiempos un poco obscuros". Inmediatamente, le vino la idea de exponer esas obras de "un artista que marcó a toda una generación" junto con las de otros pintores latinoamericanos más jóvenes. "Villanueva es un artista que se acerca mucho al mundo de Matta. Sus obras hacen soñar y cuentan muchas cosas si uno se toma el tiempo de descubrir poco a poco su mundo", dice. De él, se exponen litografías originales, retrabajadas con guache, óleo o acrílico. "En cada una hay dobles y triples lecturas. No son obras que se perciben de una sola mirada. Hay que buscar los detalles", señala. Leoncio Villanueva, que reside en Bélgica, se interesa por diferentes formas de arte, y se dedica a la fotografía y al fotomontaje tanto como a la pintura. Actualmente, está preparando una gran exposición en Lima, que será inaugurada en mayo de 2007. La obra de Zamora "puede parecer más alejada de la de Matta", pero tiene eso que yo llamo "connivencia de espíritu", que es el sentido de esta exposición, afirma la galerista. Los cuadros de Zamora evocan Venecia y el carnaval. Las máscaras son un tema recurrente, así como el reflejo, el doble. "Es un artista que trabaja con una técnica sumamente original y tiene un dominio del pastel seco que es prodigioso", señala Thuillier. "Matta es un maestro y su obra es perenne. Para todo pintor, incluso para uno como yo que ya ha pasado los 50, es un honor estar al lado de él", declara a la AFP Zamora, artista que reside en Francia y que, como el maestro, realizó casi toda su obra fuera de Chile. "Mi obra está hecha totalmente en Europa. Yo llegué aquí a los 18 años, pero en los años 50, cuando yo era alumno en la escuela de Bellas Artes de Chile, ya conocíamos la obra de Matta y, para nosotros, fue importante tener una figura universal en el arte moderno". Pero Zamora rehusa el paralelo y la posibilidad de que, hoy, él pueda influir, como Matta entonces, en la nueva generación de pintores chilenos. "Yo no estoy a la altura de Matta, soy un pintor de clase media", dice con humor. "Pero expongo en Chile y creo que se me conoce allí, lo que para mí es importante", agrega.