ORÍGENES
La existencia, yelmo.
Aleación de hierro:
Carne, vida, duelo
tiempos.
Exigua plumilla
cuando circula al viento:
Sangre, llanto, patria
aliento.
Por eso... he de irme
por donde llegué:
Madre...
¡Dilate tu matriz de nuevo!
vuélveme
a mis lejanías de esperma.
LOS LAGOS (1983)
Desde el asfalto
caló por las veredas.
Remontó articulaciones
—se encumbró—
hasta llegar a la lisura
de nuestros juegos infantiles.
Colisionó con los trastos,
arrastró roedores y paredes
junto a las vigilias de mis padres.
Empapadas.
Esa noche, un río se abrió paso
por la compuerta trasera de nuestra infancia y,
una parte de mí se ahogó en el fango.
INSOLACIÓN
Afuera, la destemplada fogosidad del sol reseca las hojas de los árboles, se achicharran y chillan las piedras, en tanto, yo guarezco a las sombras de una brisa artificial que refresca mis pensamientos:
Como nunca, Ungaretti me une a la vida:
“penetrada / en mi silencio / he escrito/nunca /tan unido a la vida”.
Whitman remonta vuelos a la estima del existir que poco antes Cioran había sepultado, cortado alas, con su pesimismo insolente:
“Me celebro y me canto a mí mismo”
Las imágenes comienzan a aflorar e invaden a las neuronas algunas chispas de inspiración….
Repentinamente,
el silencio ha hecho escala en otro lugar:
Alguien habla,
suena el teléfono,
tocan la puerta,
el perro ladra, despavorido.
Vuelve la calma.
Ahora, en mi cercana territorialidad,invoco desmoralizada los fecundos silencios de la casa de Yolanda Pantin:
“La palabra a golpes desprendida. / Volcada de revés. / La calma es un minuto”.
Pero el largo y tendido grito de un niño, más parecido al llamado de tarzán, los desgarra.
Salgo de mi escondite, encaro al sol inclemente, a las hojas resecas, a las piedras chamuscadas, también grito…. ¡Déjenme escribir!
Finalmente, el silencio se ha derretido al sol al igual que mi inspiración.
Andrea Victoria Álvarez, escritora, poetisa y docente nacida en Caracas (Venezuela) en 1956. Maestra normalista, es también integrante del grupo cultural “Pie de Página”, auspiciado por la Casa de la Cultura del estado Aragua. Reside actualmente en Buenos Aires. Sus poemas fueron publicados en diversas revistas web y blogs y figuran en las antologías “Poesía Iberoamericana del siglo XXI, tomos I y II” editadas en México por la Sociedad Internacional de Poetas y Escritores (SIPEA). Fue finalista en el primer concurso “Poemas y otros pecados capitales” de Ediciones “La Mancha” con su poema “Oración póstuma al silencio”.